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El hecho de que la nariz sea una estructura tan visible hace que cualquier depresión o resalte a partir de 2 mm se vea fácilmente y pueda provocar importantes estigmas y complejos. La búsqueda de opciones no quirúrgicas viene creciendo considerablemente día a día ya que muchos pacientes desean conseguir sólo una mejoría estética con un periodo de recuperación corto, por este motivo las técnicas mínimamente invasivas tienen un papel importante en la medicina estética.
Durante mucho tiempo se consideró que el injerto de cartílago o de hueso autólogo era el único patrón para realizar la llamada rinoplastia de aumento: sin embargo, los grandes inconvenientes que presenta esta técnica hicieron que se desarrollara la investigación y la aplicación clínica de biomateriales que pudieran ser utilizados sin estos inconvenientes.
La bioplastia nasal o rinomodelación es una técnica que se realiza sin cortes y sin cirugía, consiste en el implante de biomateriales inyectables en planos profundos o superficiales con procesos mínimamente invasivos. La bioplastia es el moldeado por medio de biomateriales biodegradables y la técnica que permite restaurar, moldear, esculpir el rostro humano.
La bioplastia podemos realizarla con materiales voluminizadores de ácido hialurónico, recomendables por su mayor inocuidad y por la duración de su efecto que oscila entre 6 y 12 meses. Para una biodegradación más lenta se utilizan otros productos más duraderos como son la hidroxiapatita cálcica (Radiesse®), el ácido poliláctico (Sculptra®) o la policaprolactona (Ellansé®) con una duración aproximada de 12 a 18 meses.
Los rellenos o fillers biodegradables hacen referencia a material que se disuelve en el cuerpo humano a través de procesos naturales, por lo cual desaparecerán tras su degradación y reabsorción.
Actualmente en la rinomodelación lo más habitual es inyectar un biomaterial en planos profundos mediante microcánulas o microagujas, respetando los principios técnicos definidos en los años de experiencia en el procedimiento. Es fundamental que la persona que realiza la técnica tenga formación y experiencia en cada uno de los procedimientos de relleno.
Muy importante también es tener en cuenta las características anatómicas propias de la nariz que hacen que este órgano sea muy adecuado para la realización de la bioplastia.
En Clínica Áureo la evaluación del paciente se hace tras la exploración física, que suele incluir la observación directa, con luces auxiliares y con la ayuda de fotografías digitales, esta valoración es fundamental para emitir el diagnóstico correcto de las alteraciones estéticas y conseguir, con relleno, modificar pequeñas depresiones, ángulos o cambiar el ángulo de la punta de la nariz para obtener una nariz más armónica y equilibrada al rostro del paciente.
Se realiza en nuestra clínica, con una intervención de pocos minutos, por lo que el paciente ve el resultado final de su nariz al momento. Es prácticamente indolora. Sólo se aplicará anestesia local en la punta de la nariz al ser esta más sensible.
Es posible que durante unos días la zona este un poco inflamada o enrojecida. Es conveniente no llevar gafas ni tocarse la nariz al menos durante 48 h. En las siguientes semanas se deben evitar saunas y tratamientos faciales profundos al igual que tareas o deportes que exijan mucho esfuerzo.
No es apropiado para narices muy grandes, ya que no es posible su reducción con este tipo de tratamiento. En narices en las que se deba modificar la estructura ósea tampoco es el indicado. En estos dos casos o el de un gran cambio radical, se tendría que recurrir a una rinoplastia convencional. En Clínica Áureo no lo recomendamos a pacientes menores de 17 años pues su nariz no está formada definitivamente.
Como ves modificar la forma y el aspecto de la nariz sin cirugía, en manos de un buen profesional, es un tratamiento rápido y sencillo gracias a la bioplastia. Si te animas somos tu clínica de medicina estética en Palma de Mallorca.
Casos propios de Rinomodelación.
