La carboxiterapia consiste en la inyección intradérmica de anhídrido de carbono (CO2) en los tejidos. El organismo produce de manera natural CO2 a razón de unos 200 ml por segundo, esta cantidad puede multiplicarse por 10 durante el ejercicio.
Sus propiedades son múltiples: mejora la microcirculación, aumenta el metabolismo local y tiene acción “quemagrasa” a nivel del tejido graso.
La acción determinante para combatir la flacidez cutánea viene dada por el efecto Bohr que se traduce en una cesión de oxígeno al tejido que tratamos con este gas. Este aumento de oxigenación favorece la formación y recambio de colágeno y elastina proporcionando tensión a la dermis.
Tiene un coste de 60€, aunque dicho importe se descontará del precio a pagar por cualquiera de los tratamientos médicos recomendados por nuestros profesionales en dicha consulta. Leer más…