Se trata de una patología muy frecuente y una causa de consulta dermatológica muy habitual. Se trata de esos “granitos” que suele salir en zona posterior de ambos brazos, que en verano suelen “encenderse” más y en ocasiones dejar una hiperpigmentación postinflamatoria residual.
En casos más severos los pacientes pueden tener las mismas lesiones en muslo y zona glútea.
Se trata únicamente de un problema de hidratación cutánea y debe insistirse en ello en su tratamiento. Además existen tratamientos tópicos específicos que ayudan a mejorar estéticamente dichas lesiones.